
"¡Me identifico!": Alcaraz quiere ganar al estilo de la 'generación Yamal'

"¡Me identifico!", respondió sin dudar Carlos Alcaraz cuando le preguntaron esta semana en Roland Garros por la manera despreocupada en que otras jóvenes estrellas, como su compatriota Lamine Yamal, afrontan los momentos de presión. El domingo defiende el título en París ante su 'mejor enemigo' Jannik Sinner.
Dos españoles, Yamal y Alcaraz, asombraron al público y coparon titulares esta semana en Francia.
El fenómeno del Barça de 17 años por el doblete ante la selección francesa (5-4) el jueves en semifinales de la Liga de Naciones ganando el pulso a los ídolos nacionales Kylian Mbappé y Ousmane Dembélé.
El segundo, recién cumplidos los 22, por su sólida defensa del trofeo conquistado el año pasado en Roland Garros, que deberá completar en la final el domingo.
"¿Te ves reflejado en la nueva generación de deportistas desacomplejados ante la presión como Lamine Yamal?", le preguntaron a 'Carlitos' hace unos días.
"Me siento identificado porque siempre he dicho que en los momentos de presión, que son muchos durante un partido o un torneo, es donde se ve a los grandes deportistas... Es la gran diferencia entre un gran atleta y uno bueno", dijo.
"Siempre me repito que en esos momentos hay que dar un plus, no tener miedo. Me identifico", añadió un Alcaraz que volverá a tener una cita con la historia el mismo día que España. Si el 14 de julio pasado, el tenista ganaba en Wimbledon horas antes de que España conquistase la Eurocopa, el 8 de junio ambos volverán a jugar una final: 'Carlitos' en Roland Garros y la Selección contra Portugal en la Liga de Naciones.
- Cuatro finales, cuatro títulos -
Por el momento, expediente impecable para el fenómeno en las grandes finales. Cuatro presencias y cuatro títulos: US Open 2022, Wimbledon 2023 y 2024, Roland Garros 2024.
El domingo llega la quinta y Alcaraz espera afrontarla "como la primera", señaló el viernes en rueda de prensa.
"Creo que es lo bonito, no pensar en el pasado, sino en vivir el momento. No queremos dar por hecho que en los próximos años vaya a ser igual o mejor, por lo que hay que darle el valor que se merece", añadió.
- 'Solo un partido de tenis' -
¿Qué te juegas el domingo?, le preguntaron. "Un partido de tenis. Simple", se limitó a responder, sonriente, despojando al duelo ante Sinner de todo lo que le rodea.
En la final le espera Sinner, impresionante ante la leyenda Novak Djokovic en semifinales, pero al que ha ganado los últimos cuatro partidos y con el que disputa por primera vez la final de un Grand Slam.
Llamados a dominar el circuito durante mucho tiempo, su rivalidad entra en un nuevo capítulo: los cinco sets bajo la mirada de un título 'grande' extienden hasta el infinito los límites físicos y psicológicos... Que se lo digan a Djokovic, Rafael Nadal y Roger Federer.
- Derecho a las 'pataletas' -
En semifinales ante Lorenzo Musetti, dominador durante casi dos horas, Alcaraz completó un excelente ejercicio de madurez: paciente hasta que llegó su momento, con alguna "pataleta", como calificó esta semana el técnico Juan Carlos Ferrero las desconexiones de su chico.
Antes de imponer su ley en el 'tie-break' del segundo set tras haber perdido el primero, Alcaraz dio una patada a la silla... Pero no cree que deba corregir estos momentos de 'liberación'.
"Me he quejado algunas veces, le he pegado una patada al asiento, pero tenemos claro que eso es momentáneo, es solo ese momento, sueltas la rabia que tienes dentro, pero que nos afecte a continuación en los juegos siguientes", señaló con la lección bien aprendida.
Con el descaro de la joven generación por bandera, un nuevo reto para el fenómeno español. Pero sin renunciar a la experiencia adquirida.
"Ya tengo 22 años, es el momento de madurar un poquito", recordó con socarronería.
W.Thompson--SFF